A finales de octubre del presente año, se hizo público el cambio del nombre de la compañía Facebook, Inc. por Meta, Inc., ello con la finalidad de incluir al universo de las aplicaciones el aumento de la realidad virtual, a lo que Mark Zuckerberg llama metaverso.
Sin embargo, en los últimos días, Meta, Inc. ha presentado algunas quejas por parte de distintas empresas por hacer uso de sus derechos de propiedad intelectual (marcas, nombres comerciales) sin consentimiento alguno.
El primer caso que se presentó fue el de MileniumGroup, una empresa de comunicaciones y marketing digital con presencia en Latinoamérica y con sede principal en Miami, la cual denunció que Meta hizo uso indebido del logo de su empresa, puesto que ya había sido registrado un año antes de que Facebook anunciara su cambio de imagen. Según declaró el CEO de la empresa, ellos defenderán su derecho a la propiedad intelectual y la creatividad que los caracteriza ante los Tribunales estadounidenses.
Ahora se suma a Meta otra denuncia por parte de una empresa con el mismo nombre. Se trata de Meta PC, que se dedica a la venta de computadoras de escritorio, laptops, hardware de computación, software, entre otras. Esta compañía fue fundada en 2020 por Joe Darger y Zack Shutt, la cual opera en Perú y en otros países de Latinoamérica.
Esta marca solicitó el registro en agosto del presente año ante la Oficina de Marcas y Patentes de los Estados Unidos bajo la clase 9 de la Clasificación de Niza, mientras que Meta, Inc. lo solicitó el 28 de octubre. Actualmente, ambas se encuentran en evaluación para ser aprobadas.
No obstante, mediante un comunicado, los fundadores de la mencionada empresa le solicitaron 20 millones de dólares a Meta, Inc. para retirar su solicitud y así evitar problemas legales. Señalaron que, si bien ambas marcas son similares, el logo de Meta, Inc. no se parece a la de Meta PC y al estar registradas bajo diferentes clasificaciones no habría riesgo de confusión para los consumidores, por lo que le solicitaron a Meta, Inc. llegar a un acuerdo económico y no seguir con la solicitud ante el órgano correspondiente.
